Esta parte me ha encantado porque se aprende mucho de un niño tanto en el aula como en el recreo.
Hemos observado en primer lugar a los alumnos que van a segundo, que son tres.
El alumno a: que presenta dispraxia cognitiva motriz, adopta constantemente una actitud retraída, incluso esconde la mitad de la cara. No sabemos si se puede deber a que es por el lado que mejor recoge los estímulos o porque se siente incomodo y es una manera de esconderse. Por otro lado, tiene una manera inflexible de aprender y no es capaz de aplicar los aprendizajes a nuevas situaciones. en el recreo que se junta con la alumna B.
Además este alumno también se sienta con la alumna B, que también presenta dificultades y a la que vamos a evaluar para comprobar que no hay involución cognitiva. Esta alumna no tiene las mismas dificultades que el alumno A y se muestra indecisa e insegura. Creemos que no es conveniente que pase tanto rato con el otro alumno, ya que así no se socializa con el resto de alumnos y además la vuelve más insegura todavía.
El alumno C que tiene el síndrome de Danlos es incapaz de seguir la clase, ya que le falta musculatura y energía hasta para agarrar el lápiz. Este alumno esta pendiente se diagnosticar, pero es obvio que necesita adaptaciones de acceso para llevar con naturalidad su inmersión escolar.
Los otros alumnos de infantil a nivel social no muestran dificultades pero si en los aprendizajes. Uno de ellos, tiene constantes ataques de epilepsia que le afectan físicamente y por lo tanto también en el aprendizaje. Es inflexible en sus aprendizajes. el otro alumno no habla pero sus interacciones con los demás son buenas.
En definitiva, para un orientador conocer las dinámicas de la clase es importante ya que se recoge mucha información a nivel afectivo y emocional, cognitivo, social y motor. Es clave no sólo para hacer un diagnóstico posterior, sino para realizar el plan de actuación y establecer que metodologías son más convenientes utilizar o cuales son las prioridades en el aprendizaje.
A continuación, se puede ver una foto del alumnado de segundo en la clase de educación física. Con el profesor de esa área se estableció trabajar primero con juegos y luego dejar otro rato de la sesión para que le alumnado jugara con el material como quisiera. Esta metodología llamada libre exploración sirve para observar al alumnado a nivel motor, social y en cuanto a juego simbólico se refiere.
No hay comentarios:
Publicar un comentario